lunes, 25 de enero de 2010

¿QUÉ HACEMOS?

Obvio es que no ganamos para pañuelos de papel. Los cambios del tiempo afectan sobretodo a mi nariz, convirtiéndola en una fuente inagotable.
Hace unos días vino el calor para esfumarse de la noche a la mañana siguiente. Calor y frío en rápida sucesión que nos hace tiritar para después sudar.
Bueno, comentemos la actualidad que es lo que interesa.
Comenzamos con el terremoto del pequeño país caribeño. Pase que el Gobierno cometa un error al dar demasiado pronto la propaganda de la aparición de un cadáver que creyeron, de buena fe eso sí, que pertenecía a la funcionaria española en la ONU. Ahora sí que se ha encontrado su cadáver.
El terremoto trae otro de imprevisibles consecuencias. Este otro terremoto tiene su epicentro en las reuniones de la ONU con representantes de países que ofrecen ayuda humanitaria a las víctimas de la atroz catástrofe.
Para empezar no se ponen de acuerdo. La distribución de las ayudas estan pendientes de un hilo muy fino.
Peso importante sobre este desacuerdo es la participación de los EE.UU.
No participan, al parecer, como un refuerzo de ayuda humanitaria. Más bien parece que les cuesta despegarse de la aura guerrera e invasora con que se pasea por el mundo.
Los EE.UU. actúan, a través de su ejército, como un país dominante en el concierto mundial de las guerras y su entrada en Haití es una auténtica invasión.
Bien está que se monte un sistema de seguridad para evitar los vandálicos saqueos y la actuaciones de los delincuentes y no delincuentes ahitianos, pero de ahí a controlar todo con mano férrea hay un abismo.
La alarma ya saltó con los franceses (incidencias en el aeropuerto de Port-au-Prince) y ello debería ser un aviso al resto de cooperantes.
¿Qué hacemos entonces?
Los estadounidenses de América del Norte se creen los amos del mundo. Cuando tienen el mayor índice de delincuencia. En eso si son los amos.
¿Qué hacemos con los peperos?
La actitud hipócrita de los barones, que gobiernan las tres Comunidades de mayoría del PP, sobre la Educación no respetando las leyes y tergiversando el fundamento con acusaciones de “ingerencia del Gobierno en sus Comunidades” hace que los vea como delincuentes en toda regla.
Negarse a aceptar el tema de los portátiles, y éstos, no hace ningún bien a los pequeños ciudadanos del país. Mientras que los demás pequeños ciudadanos del resto de Comunidades disfrutan de los avances tecnológicos los pequeños habitantes de las Comunidades gobernadas por esos barones quedan retratados.
Lamentable y ridículo juego político del PP sobrellevado por la desfachatez de su líder con su manía sobre Rodríguez Zapatero. ¡¡Mariano, deja de ser niño!!
Las peperas caras bonitas, pero de cerebros vacíos, se están comportando como auténticas Evas con las manzanas preparadas.
La mala sangre que destilan ya se nota hasta en la Patagonia chilena, allá donde Sainz consiguió su Rally largamente perseguido.
¿Qué hacemos?, el cabreo del PP es tan evidente que nos da vergüenza ajena.
Regreso a mis lares donde encuentro con que la Casa de Ceuta en Barcelona me echa de menos y, solapadamente, me piden que deje de acudir al Casinet.
La verdad es que he dejado de acudir al local social desde hace tiempo y, aunque no me creo imprescindible, es hora que vuelva con ellos.
Al fin y al cabo son amigos, aparte de paisanos.
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